Magdalena López magdalenalopez.asesora@larepublica.net | Viernes 30 septiembre, 2022 04:15 pm
Personas que tienen un alto nivel de autoexigencia, que son perfeccionistas, autocríticas y temen al fracaso, son las más propensas a sentirse impostores en sus puestos de trabajo, según Gabriela Roberti, especialista en talento.
“Este fenómeno es una manifestación psicológica donde las personas pueden desconfiar en algún momento de su vida, sobre sus capacidades y dudar del puesto de trabajo que están ocupando actualmente”, agregó Roberti.
Y es que este síndrome se caracteriza por experimentar malestar emocional asociado al sentimiento de no merecer la posición que se ocupa, ya sea laboral, académica o social.
Algunas causas que pueden arrastrar a una persona a sufrir este síndrome se debe a la influencia familiar, creencias, estereotipos sociales y de género.
Para superar el síndrome del impostor, es importante promover el autoconocimiento, definir fortalezas y capacidades, fomentar la tolerancia, tener una visión más amplia sobre los errores y aciertos y evitar comparaciones constantes.
“De igual forma, es importante el papel de las organizaciones a la hora de apoyar a sus colaboradores que sufren o han sufrido de este fenómeno, es necesario que fomenten el uso de herramientas como coaching individual y grupal, e impulsen el trabajo en equipo para evitar exceso de trabajo y cumplir con el bienestar de todos los colaboradores”, concluyó Roberti.